Y, aunque la conclusión es que el mercado piensa que los servicios en la nube están cumpliendo las expectativas estratégicas y de servicio y que los problemas serán superados, no es menos cierto que se identifican ciertas preocupaciones:
Frente a esto, los participantes en el estudio también han identificado los aspectos que están siendo adecuadamente contemplados por la computación en la nube:
Finalmente, destacar que los factores que inciden en la toma de decisiones son, por orden de importancia:
Como se puede ver, un estudio que nos ayuda a entender la situación actual, que dibuja un futuro esperanzados para la computación en la nube y que nos ayuda a identificar los retos para los próximos años… veremos si somos capaces de superarlos…
Fuente: Inteco
Ya que el cómputo en la nube es algo más que sólo infraestructura de TI, plataformas y aplicaciones, los desarrolladores de Consideraciones de Seguridad para el Cómputo en la Nube enfatizan que la decisión de operar en la nube no debe ser tomada únicamente por las organizaciones de TI. El uso de los servicios de nube podría suponer un alto riesgo para el negocio y debe ser evaluado por las partes responsables de las diferentes funciones de control dentro de una empresa.
Consideraciones de Seguridad para el Cómputo en la Nube está diseñado para permitir el análisis efectivo y la medición del riesgo a través de un kit de herramientas que contiene elementos como árboles de decisiones y listas de verificación que esbozan los factores de seguridad a considerar cuando se evalúa a la nube como una solución potencial.
Fuente: ISACA y segu-info
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Una encuesta realizada entre más de 1.200 funcionarios de gobierno y ejecutivos de 10 países reiteró que el almacenamiento de la información en la nube es lo que detiene la migración hacia ese tipo de servicios
El 47% de los participantes de una encuesta realizada por KPMG mostró que la seguridad es el desafío más significativo al que se enfrentarán empresas y gobiernos al momento de migrar los servicios y los procesos a las plataformas de cloud computing.
Las inquietudes en torno a la seguridad fueron particularmente importantes entre las principales entidades gubernamentales, donde el 56% de los encuestados mencionó estar preocupado por este tema.
Sin embargo, casi el 80% de todos los encuestados mencionó que su confianza en los servicios de cloud computing aumentaría si un organismo gubernamental los certificara.
“Las entidades gubernamentales, por lo general, tienen acceso a información extremadamente confidencial y, por lo tanto, son objetivo habitual de los crackers”, advirtió John Herhalt, presidente Global de Gobierno e Infraestructura de KPMG.
“Los líderes del área de TI del sector público necesitarán asegurarse de que sus proveedores de servicios de cloud computing pueden brindar protocolos de seguridad y protección sólidos antes de migrar los servicios e información clave a estas plataformas”, mencionó Herhalt.
“Al prestar los servicios mediante una plataforma de cloud computing, los gobiernos comprueban cada vez más que pueden mejorar la manera en que los ciudadanos acceden a la información y –a la vez–lograr una experiencia más transparente y receptiva en la interacción con las áreas clave del sector público,” afirmó Herhalt.
“Sin embargo, garantizar la seguridad de la información será fundamental, particularmente, en relación con la información personal de los ciudadanos y la información gubernamental crítica”, finalizó.
Privados, al frente
Los resultados de la encuesta se resumen en el informe Análisis de los servicios de cloud computing: un estudio global de la adopción de estos servicios por parte del sector público.
La encuesta comprueba que el avance de las entidades gubernamentales es significativamente menor al que experimentan las empresas con fines de lucro según la relación 9-13 por ciento.
Solamente 12% de los funcionarios del gobierno manifiesta que más del 10% de los gastos totales de TI de dichas instituciones fueron destinados a los servicios de cloud computing en 2011. Se prevé que esta cifra aumente más del doble alcanzando el 28% hacia fines de 2012.
“La era de la nube ha comenzado y la pregunta no radica en si las organizaciones se decidirán o no por su adopción, sino más bien en qué tan rápido y en qué modalidad. Tanto en los sectores público como privado existe aún escepticismo, mostrándose el sector público como el más cuidadoso. Aún así, las crecientes experiencias a nivel mundial en ambos sectores y la incremental madurez de los proveedores terminarán de disipar el escepticismo en el corto plazo”, afirmó Walter Risi, director de IT Advisory de KPMG en Argentina.
“La nube presenta una oportunidad de mejora que va más allá de los ahorros en infraestructura, abarcando también la agilización en los modelos operativos y la optimización del esquema de relacionamiento con los proveedores de servicios de IT. Estas promesas darán sus frutos en la medida de que las organizaciones adecúen su arquitectura empresarial para aprovechar los beneficios de la nube, elijan a los proveedores de servicios de IT más adecuados para acompañarlas y transformen sus modelos de gobierno de proveedores consecuentemente”, agregó Risi.
Por otro lado, casi un tercio de los encuestados del sector público se inclinó hacia la adopción de un entorno privado de cloud computing, mientras que el 22% afirmó que está analizando la posibilidad de utilizar una plataforma pública.
El informe de KPMG también identifica ciertas jurisdicciones que han ocupado una posición de liderazgo en la adopción de los servicios de cloud computing.
Especialmente, los gobiernos de Australia, Italia, Dinamarca, Singapur y los EEUU parecen haber progresado considerablemente en la implementación de esta tecnología, ya que casi el 30% de los encuestados de estos países señalaron que ya han implementado los servicios de cloud computing parciamente o en su totalidad.
Fuente: http://www.infobae.com
Creer que la nube es una extensión de tu ordenador personal puede ser una falsa ilusión, sobre todo cuando los archivos que uno deja en un servicio de almacenamiento no son tan privados como uno pensaba. Hoy nos enteramos que eso le pasó a varios usuarios de SkyDrive, que vieron cancelada su cuenta sin previo aviso de un día a otro porque Microsoft consideró que los archivos que alojaban violaban los términos de uso del servicio.
En enero de 2012, un fotógrafo alemán que tenía 4 fotografías de desnudos parciales en una carpeta no compartida y que él pensaba que nadie veía, encontró su cuenta cancelada por parte de Microsoft. El asunto causó bastante revuelo en la prensa, y se habló de la función de guardado automático de las fotos que uno toma con el móvil pero también del hecho de que Microsoft estuviera monitorizando archivos supuestamente privados.
En mayo, un usuario holandés, que había subido 12 GB de contenido a su cuenta en SkyDrive, vio cerrado su acceso a su cuenta de Windows Live, lo que significaba que tampoco podía acceder a su correo en Hotmail, o a Xbox Live. La única explicación que le dio Microsoft fue que habían encontrado una carpeta en su SkyDrive con contenido que no estaba aprobado por el código de conducta de Microsoft SkyDrive. También esta carpeta era privada y no estaba compartida con nadie más.
Este usuario terminó creando una nueva cuenta, perdiendo la anterior, lo que tenía guardado e incluso las aplicaciones que había comprado.
¿Por qué sucede esto? Microsoft se reserva el derecho a suspender una cuenta por cualquier razón, y de hecho monitorea lo que los usuarios suben a SkyDrive, aunque sean cuentas privadas. Por esto no deberíamos ser tan ligeros al considerar a la nube, por lo menos en este caso, como una extensión de nuestro ordenador. Hace poco hablábamos de Cubby, y no está de más tener los términos de servicio en cuenta como uno de elementos a considerar en el momento de elegir uno u otro servicio de almacenamiento en la nube.
Algunos usos prohibidos que define el código de conducta famoso de Microsoft SkyDrive son los siguientes:
Subir, publicar, transmitir, transferir, distribuir o facilitar la distribución de ningún contenido (incluyendo texto, imágenes, sonido, video, datos, información o software) o usar el servicio en alguna forma que:
El instituto Fraunhofer para la tecnología de la seguridad de la información, ha realizado un informe sobre varios servicios de almacenamiento en la nube comparándo los de servicios y la seguridad, obteniendo datos y conclusiones interesantes.
El estudio se ha basado en siete servicios a los que se puede acceder mediante un cliente instalado en el ordenador del usuario. Estos servicios son CloudMe, CrashPlan, Dropbox, Mozy, TeamDrive, Ubuntu One y Wuala.
En el informe se realizó una comparativa en cuanto a funcionalidades y servicios de los distintos proveedores de almacenamiento como son: copias, copias de seguridad, sincronización y compartición de ficheros.
La parte más importante del mismo, se refiere a aspectos de seguridad como registro en el servicio, inicio de sesión, cifrado, y compartición de ficheros. En algunos de ellos se han encontrado vulnerabilidades, explicadas en el informe.
También hay una parte del informe donde se explican algunos conceptos legales referidos a diferencia entre la legislación americana (Patriot Act) y la europea, exponiendo que la protección de datos en Estados Unidos es distinta y más débil que en Europa, por lo que los servicios alojados en Europa son más fuertes en ese aspecto.
También se señala que están elaborando otro informe en el que se incluirán servicios como Amazon S3, cuyo funcionamiento es diferente a los analizados en este informe.
Fuente: Inteco
La externalización de la mano de los servicios en la nube abre nuevas posibilidades en seguridad para las organizaciones.
La externalización como concepto no es algo nuevo, desde hace tiempo las empresas externalizan departamentos, áreas, infraestructuras e incluso personas, pero con la llegada de la computación en la nube, la externalización va un paso más allá, permitiendo a la empresas y organizaciones disponer de todo tipo de aplicaciones y productos que pueden ser contratados como un servicio.
La computación en la nube abre interesantes posibilidades para las empresas y organizaciones, pero en especial para las pymes, ya que los servicios en la nube poseen características muy atractivas para las pequeñas y medianas empresas: reducido coste, rápido despliegue e implantación, y una contratación muy flexible, que permite disponer de distintos planes y modalidades.
Las ventajas parecen evidentes, pero un modelo tecnológico basado en la externalización también plantea riesgos y uno de los aspectos que más preocupa a los expertos en seguridad es el hecho de que este nuevo modelo supone poner en manos de terceras personas una parte de la información que tradicionalmente se encontraba dentro de la organización. Este problema no es nuevo y desde luego no es exclusivo del Cloud Computing. En cualquier caso, las ventajas que ofrece son muy valoradas por las empresas y las organizaciones, lo que está provocando una rápida adopción de este nuevo modelo tecnológico.
Las tecnologías Cloud también han llegado a la industria de seguridad TIC, aunque la externalización como concepto en las soluciones de seguridad no es nueva, de hecho, desde hace tiempo existe un concepto denominado Seguridad Gestionada (Managed Security) que consiste básicamente en externalizar las infraestructuras, servicios y operaciones de seguridad de las organizaciones para centralizarlas en lo que se conoce como SOC (Security Operation Center) o Centro de Operaciones de Seguridad.
Los SOC son básicamente centros de proceso de datos (CPD), pero a diferencia de estos, los SOC, son centros a través de los cuales se examina, filtra y bloquea el tráfico de red con el objetivo de eliminar todo tipo de amenazas, como el malware, el spam o ataques de denegación de servicio. Los SOC pueden proteger a decenas o cientos de empresas y organizaciones al mismo tiempo. Si los comparamos con los proveedores de servicios de internet, las compañías que ofrecen este tipo de servicios, son proveedores de servicios de seguridad.
Gracias a las tecnologías Cloud, la industria de seguridad TIC ha comenzado a ofrecer interesantes soluciones de seguridad basadas en estas tecnologías, pero también es cierto que en la mayoría de los casos, se trata de evoluciones de soluciones de seguridad que ya existían y que ahora se aprovechan de estas tecnologías. Tal es el caso de los servicios de copias de seguridad on-line, disponibles desde hace años, aunque no con la oferta y posibilidades que podemos encontrar en la actualidad.
Otro ejemplo son las soluciones para protección contra código malicioso (anti-malware), en las cuales encontramos fabricantes que ofrecen este tipo de aplicaciones basadas en “la nube” o que aprovechan estas tecnologías para mejorar sus soluciones, facilitando su despliegue e implantación o ayudándose de estas tecnologías para el desarrollo de sistemas de detección de amenazas más evolucionados. En realidad, los tipos de soluciones de seguridad que aprovechan la tecnología Cloud actualmente son relativamente pocos, concentrándose la mayoría de ellas en servicios de respaldo y recuperación ante desastres.
Los servicios Cloud poseen una característica que ayuda a las empresas a mejorar su seguridad y es la propia externalización. Aparentemente, ceder el control de los datos a una empresa externa o utilizar aplicaciones en la nube en vez de aplicaciones tradicionales instaladas en el puesto de trabajo, entraña riesgos, puesto que básicamente perdemos el control de una parte de los recursos y activos de la organización, pero también es cierto, que para muchas empresas lo ideal sería poder dedicar todos sus esfuerzos a la actividad que genera negocio y les reporta beneficio, dejando que otros se ocupen del resto, de aquellas tareas en las cuales no son expertos o no disponen de recursos para poder llevarlas a cabo de forma adecuada.
Si tomamos como ejemplo las empresas de gran tamaño o que cuentan con distintos departamentos o áreas, estas suelen externalizar parte de sus actividades de gestión o de infraestructura, pero su tamaño y capacidad es tal, que pueden contar con su propio personal, por ejemplo, para soporte informático, gestión de recursos humanos, administración, etc. En cambio en las pymes, micro-pymes o los autónomos, el panorama es bien distinto. Sus recursos suelen ser muy limitados, no disponen de personal y no tienen tiempo para dedicarlo a la seguridad o al mantenimiento de infraestructuras. La externalización forma parte de su modelo de negocio.
Los servicios de Cloud encajan muy bien con las pymes, que buscan soluciones de bajo coste, fáciles de desplegar e implantar y de cuya gestión se encargan otras empresas, aportando un servicio especializado, que de otra forma no sería posible. En este sentido, no es descabellado pronosticar que en los próximos años los servicios Cloud serán ampliamente aceptados por las empresas y organizaciones y en especial, por las pymes.
Desde INTECO-CERT, queremos hacer hincapié en la necesidad de ser conscientes de los riesgos que implican los servicios en el Cloud. Es fundamental que los proveedores de servicios Cloud puedan ofrecer garantías a sus clientes. Por otro lado, es fundamental que las empresas interesadas en este tipo de servicios, sopesen adecuadamente las distintas opciones y opten siempre por proveedores que ofrezcan garantías.
Fuente: Inteco
Por Hernán Calderale, VP of Sales Southern Latin America para CA Technologies
El cloud computing es el nuevo paradigma hacia el cual se seguirá moviendo de manera sostenida la operación durante los próximos años.
En este sentido, la empresa de investigación de mercado Gartner asegura que, para 2014, la computación en la nube va a alcanzar un volumen de operaciones de 150 mil millones de dólares anuales, lo que representa tres veces más que el monto invertido en 2009.
Las razones para este fenómeno son diversas. En mercados como el norteamericano y el europeo, la adopción tiene que ver fundamentalmente con el surgimiento de nuevos marcos regulatorios dentro de las organizaciones, que demandan mayor eficiencia operativa, menor consumo de recursos y máxima disponibilidad.
Pero en regiones como Latinoamérica, el avance del cloud computing se explica también en parte por otros motivos que están relacionados, fundamentalmente, con las ventajas de costos que presenta este nuevo modelo.
A la hora de implementar un proyecto de cloud computing, los ejecutivos de TI se encuentran frente a una serie de desafíos que resultan, hasta el momento, inéditos.
Los CIO, que históricamente fueron los responsables de garantizar la seguridad de la información, la estabilidad de los servicios y el cumplimiento de las regulaciones y procesos internos, se enfrentan a un nuevo escenario en el que deben demandar estas tareas a un proveedor de servicios externo.
A partir de esta nueva modalidad de operación, los responsables de TI se convierten en una suerte de auditores, que tienen la responsabilidad de seleccionar a los proveedores más adecuados y de exigirles el cumplimiento de los términos y condiciones del contrato.
¿Y qué deben demandar los profesionales que lideran el área de sistemas? Fundamentalmente, lo mismo que ellos siempre procuraron obtener para garantizar la estabilidad y seguridad en sus negocios: visibilidad constante para saber, a cada momento, qué está sucediendo con las operaciones de la empresa.
Si bien muchos se preguntan respecto a los estándares de seguridad que se manejan en la nube, lo cierto es que lo que se modifica no es la vara con la que se mide la fortaleza de las aplicaciones, sino la manera de organizar las operaciones.
La migración a cloud computing requiere que las corporaciones exijan exactamente los mismos controles que aplicarían en una operación interna.
De hecho, cuando una compañía muda su infraestructura a la nube, las expectativas en términos de seguridad no tienen por qué ser menores, por el contrario, pueden incluso incrementarse.
La migración a la nube se ha transformado en una necesidad de negocios en la que el retorno de la inversión, la maximización de los recursos disponibles y la reducción del impacto ambiental de las operaciones son factores fundamentales.
Hoy por hoy, muchas organizaciones deciden mudar su infraestructura a entornos cloud basados en estas variables.
Sin embargo, al mismo tiempo, deben tomar en cuenta que existen otros aspectos, como el aumento de la movilidad, que también constituyen un impulso para la adopción de este nuevo paradigma.
En un mundo que avanza, cada vez más, hacia un esquema de operaciones totalmente móvil, la gestión de infraestructura en la nube resulta clave para ofrecer alta disponibilidad y beneficiar un incremento de la productividad.
En este contexto, la seguridad aparece como una duda recurrente que, de todos modos, no puede ser una barrera que detenga un avance que resulta necesario.
Por supuesto, el incremento de la movilidad y, consecuentemente, del flujo de información exigen que se preste especial atención al monitoreo en tiempo real de las operaciones.
En esta nueva etapa, ya no importa tanto desde qué dispositivo se accede a la información, lo importante es determinar correctamente quién accede.
Una de las nuevas claves, entonces, debe estar puesta en el manejo correcto de las identidades.
Otro punto fundamental, es demandar a los proveedores un grado de visibilidad que permita lograr un estándar de control que equipare el que se puede lograr en operaciones internas.
Si las organizaciones ponen el foco en estas cuestiones, sin lugar a dudas van a lograr obtener grandes beneficios a partir de la mayor flexibilidad, dinamismo y eficiencia que ofrece el cloud computing.
Hernán Calderale es VP of Sales Southern Latin America de CA Technologies
Fuente: (Fuente: iprofesional)